Refrescante y elegante, este abanico de madera de peral pulida es una pieza que une tradición y estilo, con patrones inspirados en los alicatados de la Alhambra.

Los alicatados de la Alhambra son una expresión sublime del arte nazarí, donde cada tesela encaja con precisión matemática en composiciones que desafían el tiempo. Cada pieza de cerámica vidriada, cortada de forma manual e individual, permite que encaje como un puzle perfecto, reflejando la destreza de los artesanos de la época. Esta técnica basada en la combinación casi infinita de formas geométricas da lugar a superficies de inigualable belleza.